Los productores agrícolas se preparan para la nueva campaña sojera 2022/2023, puesto que el 1 de setiembre prevén iniciar la siembra de soja, trigo y maíz. Esperan que para diciembre y el año próximo se den mejores resultados teniendo en cuenta que a consecuencia del quiebre de producción registrado en la zafra anterior las exportaciones del grano se redujeron en un 50,5% hasta mayo en comparación al año pasado.
El Ing. Rubén Sanabria, vicepresidente de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP), en comunicación con La Nación – Nación Media comentó que los agricultores ya cuentan con las bases dispuestas respecto a la siembra. “El agricultor ya está preparado, ya plantó por ejemplo el trigo que está totalmente germinado, más de 1.000.000 de hectáreas vamos a hacer en el país en trigo que es la base para el plantío directo”, afirmó. En cuanto a la soja, proyectan una siembra de 3.700.000 hectáreas en todo el país.
La disponibilidad de semillas es una de las preocupaciones en el sector, puesto que con la zafra normal no se pudo obtener buenos resultados. “La zafra normal no pudimos sacar, sacamos de zafriña y algunos agricultores no pudieron ni guardar porque tenían compromisos de entrega y tuvieron que vender así como entregar incluso sus semillas y ahora se están rebuscando para disponer de semillas en el campo. Pero creo que habrá disponibilidad”, añadió Sanabria. Igualmente manifiestan que los agricultores podrían tener sobrecostos debido a las compras que deberán realizar y eso afectará en el precio.
Suba en insumos
Por su parte, Eno Michels, presidente de la Asociación de Productores de Soja (APS), indicó que se ha hecho la compra anticipada de abono, el cual se encuentra en tránsito y algunos galpones ya lo están recibiendo. Sin embargo, comentó que el abono registra un aumento importante en el precio. “Se puede notar un incremento importante en el precio de hasta más del 100% en algunas formulaciones”, subrayó.
Del mismo modo aseguran que todos los insumos utilizados subieron de precio a partir de enero y febrero, como las semillas, los químicos y el combustible. Actualmente el abono está a US$ 1.000 por tonelada, mientras que el año pasado cada tonelada costó US$ 490, comentó Michels en entrevista con el diario La Nación – Nación Media.
Contratos con agroexportadores
En cuanto a los contratos con agroexportadores, estos ya se están cerrando con el objetivo de aprovechar los buenos precios de la soja que rondan los US$ 550 la tonelada aproximadamente, además para realizar el pago de costos de la producción.
“Hay necesidad de alimentos en el mundo, esto se usa para aceites y también para convertir en carne para el consumo. Entonces podemos decir que ya hay dinamismo en ese aspecto”, finalizó el vicepresidente de la CAP.