Un Tribunal de Sentencia de Villarrica absolvió a Papo Morales por el presunto intento de homicidio del ex capataz de la estancia de su familia. La Fiscalía anunció que apelará el fallo y que pedirá un nuevo juicio.
El Tribunal de Sentencia de la ciudad de Villarrica, Departamento de Guairá —presidido por Julio Alfonso e integrado por Porfirio Martínez y Víctor Ortigoza— resolvió absolver a Gregorio Ramón Papo Morales en una de las causas que afronta.
Se trata del caso en el que fue acusado por intento de homicidio doloso y dos hechos más, denunciado por Antonio Talavera, ex peón de la estancia de la familia de Morales, presuntamente ocurrido en el distrito de Iturbe, Guairá.
De acuerdo con lo que informaron a través de NPY, el tribunal no coincidió con los argumentos de la Fiscalía sobre la tentativa de homicidio, cuya pena es mayor a 20 años, por lo que solo lo sentenciaron por coacción grave.
La pena máxima para este tipo de hechos es de solamente dos años de prisión, e incluso obtuvo una salida procesal en concepto de una donación por valor de G. 30 millones a dos instituciones de beneficencia, un hogar de ancianos y un centro de adicciones.
Asimismo, los magistrados dispusieron que durante los dos años Papo Morales se someta a un tratamiento de recuperación de las drogas, debido a que en el juicio reconoció que es adicto a la cocaína.
Sin embargo, la Fiscalía ya adelantó que apelará el fallo y pedirá la anulación del juicio, a fin de iniciar uno nuevo, considerando que en la parte intermedia del proceso se excluyó un video en el que se lo vio supuestamente apuntando con un arma de fuego a un capataz.
El material audiovisual del caso, que data de junio de 2018, incluso se hizo viral en su momento y tras ello la Fiscalía lo acusó por los hechos punibles de coacción grave, tentativa de homicidio doloso y violación de la ley de armas.
Gregorio Papo Morales también afronta una causa por el homicidio del joven Robert Marín, ocurrido en noviembre del 2020, la cual ya contó con varios retrasos ante chicanas presentadas por el imputado.
Este caso está en manos de la jueza penal de Garantías Cynthia Lovera, quien fue recusada por Morales e incluso fue amenazada por él al momento de recusarla, pero finalmente fue confirmada en la causa.
Por el homicidio de Marín también está como coprocesada Cinthia Ramona Ojeda, quien fue imputada por omisión de auxilio, omisión de avisar sobre un hecho punible y frustración a la persecución y ejecución penal.
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