Después de la muerte del peligroso criminal y narco Óscar Ramón Cardozo, alias King Kong, quien fue ultimado días pasados por sicarios en Cambyretá, Departamento de Itapúa, varios hechos sobre el manejo del sistema judicial en el Sur del país saltaron a la luz.
En ese sentido, esta vez se dio a conocer que Milciades Raúl Vigo González –hermano de Cinthia Vigo González, la defensora pública de Caazapá, del departamento que lleva el mismo nombre– estaría eventual y completamente libre, pese a ser el principal sospechoso del asesinato de dos personas, ocurrido en 2010, en Carlos Antonio López, Itapúa.
La defensora ya había sido muy cuestionada recientemente, debido a que se descubrió que su vivienda fue el sitio donde King Kong debía guardar prisión domiciliaria. Además, Cinthia Vigo González es esposa de Carlos Walter Méndez, quien estaba al mando del rodado en el que iba el presunto narco King Kong cuando ocurrió el atentado el pasado 3 de julio.
Tras ser declarado en rebeldía y contar con una orden de captura internacional, Milciades Vigo se presentó ante el Juzgado Penal de Garantías de Encarnación, Departamento de Itapúa, a un día de iniciarse la feria judicial, donde solicitó el cese de su estado de rebeldía y, como medida alternativa a la prisión, pidió la prisión domiciliaria.
Lo más llamativo del caso es que el procesado –que residía anteriormente en la localidad de Carlos Antonio López, Itapúa– fijó residencia en Caazapá, sobre la calle Presbítero Adolfo Zaracho, justamente en el domicilio de su hermana, Cinthia Vigo González.
Mientras tanto, su pedido de prisión domiciliaria tuvo lugar mediante la jueza Graciela Samudio, quien decidió beneficiarlo con la medida. Esta magistrada fue destituida en el 2019 por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) por mal desempeño de funciones.
Seguidamente, el Ministerio Público solicitó en varias ocasiones revocar las medidas alternativas de Milciades Vigo, pero esto fue rechazado por el Juzgado Penal de Garantías de Encarnación, a cargo de la misma magistrada.
Más adelante, el sospechoso del doble asesinato se ausentó del proceso y no se presentó a las audiencias, por lo que, a pedido del Ministerio Público, para el 16 de octubre de 2013, el Juzgado Penal declaró nuevamente su rebeldía y se dispuso la orden para su captura.
Recién en el 2018 se tuvo conocimiento de que el hombre estaba afrontando otro proceso por homicidio culposo en Argentina, por lo que –a pedido de la Fiscalía y de la querella adhesiva– se solicitó su extradición a las autoridades del vecino país.
Tras esto, Milciades Vigo fue presentado ante el Juzgado Penal de Garantías de Urgencias un 31 de diciembre de 2021, justo un día que no era hábil, debido a que la Corte Suprema de Justicia había declarado asueto judicial.
De acuerdo con lo que señala el acta de audiencia, el procesado pidió su libertad, alegando que se presentó “voluntariamente” y la jueza de Encarnación, Claudia Scappini, le concedió de nuevo la «prisión domiciliaria» en la casa de la defensora.
Ambas medidas de «prisión domiciliaria» fueron concedidas a Milciades Vigo, pese a que los procesos por homicidio doloso no contemplan como medida alternativa el arresto domiciliario.
El presunto homicidio
El doble asesinato se registró en la madrugada del 7 de marzo de 2010, en las afueras de un local bailable, en el barrio Residencial del distrito de Carlos Antonio López, Departamento de Itapúa, donde se desarrollaba una fiesta.
De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, las víctimas fatales –identificadas como Jorge Ramón Espínola Vega y Édgar Ramón Román Rivarola– se acercaron y se recostaron por el vehículo de Milciades Vigo.
Esto molestó al presunto agresor, por lo que en ese momento comenzó una discusión entre ambas partes. No obstante, las dos víctimas fatales decidieron retirarse e ingresaron a otro vehículo, momento en el que supuestamente el hermano de la defensora llegó hasta ellos, desenfundó un arma y ejecutó disparos contra el parabrisas del automóvil.
Aparentemente, las balas terminaron impactando contra los dos hombres, quienes perdieron la vida, mientras que el presunto agresor se subió a su rodado y se dio a la fuga. Todo esto ocurrió ante la presencia de varios testigos y, poco tiempo después, se encontró el automóvil de Vigo abandonado en las inmediaciones del río Paraná.
Milciades Vigo fue imputado el 21 de marzo de 2020 por homicidio doloso, el 24 del mismo mes fue declarado en rebeldía y para el 23 de abril el Juzgado impartió una orden de captura internacional en su contra.
Actualmente, a más de una década del hecho, el proceso se encuentra en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) tras una nueva chicana presentada por la defensa del procesado, mientras los familiares de ambas víctimas siguen a la espera de lograr justicia para sus allegados.
Todo esto saltó a la luz tras el asesinato de King Kong, quien había logrado su medida alternativa gracias a la jueza Karina Ruiz Díaz, de la localidad de María Auxiliadora, Itapúa, también en la vivienda de la defensora pública de Caazapá.
King Kong había violado la medida alternativa y fue ultimado de un balazo en la cabeza, cuando salía de una carrera de caballo a bordo de una camioneta Kia Sorento, en compañía de Carlos Walter Méndez, quien es esposo de la defensora pública de Caazapá, Cinthia Vigo González. Méndez estaba al mando del rodado cuando ocurrió el ataque a King Kong, pero resultó ileso. UH