El economista y exministro de Hacienda, Manuel Ferreira, señaló a través de su cuenta de Twitter que en el 2022 el Producto Interno Bruto (PIB) de Paraguay podría verse seriamente afectado en las predicciones que se hicieron hasta la fecha, como consecuencia de la sequía que golpea actualmente al sector agrícola.
“Si es que se confirman las pérdidas del sector agrícola en 50%, estaríamos con una caída del PIB agrícola de alrededor del 27% y el crecimiento del PIB total llegaría a 0,7% para 2022″, publicó Ferreira.
El economista destacó en ese sentido que se debe tener en cuenta el impacto global de dicha sequía por la que atraviesa el país. “Sector financiero: habrá que refinanciar deudas, sobre todo a los acopiadores que no van a poder cobrar la cuenta del productor. Sector comercial: venta de fertilizantes, agroquímicos, maquinarias y combustibles van a ver caídas importantes en sus ventas y cobranzas”.
Además, agregó que también afectará al sector transporte de carga, teniendo en cuenta que habría una pérdida directa de 5 millones de toneladas, lo cual implicaría 192.000 fletes menos a 30 toneladas por flete, menos actividad en puertos graneleros y unos 120 trenes de barcazas menos.
“Sector industrial: la soja existente, que encima va a ser de mala calidad (verdines, grano achicharrado, etc.) no sería suficiente para el volumen industrial que necesita el país (unos 4,5 millones de toneladas). Esto podría generar pérdidas también al sector”, advirtió.
En su balance Ferreira igualmente incluyó al sector servicios vinculado al campo (asistencia técnica, talleres, estaciones de servicio, almacenes, seguros) que vería muy reducida su facturación por el fenómeno de la sequía y el bajo nivel de producción.
Incluso, en materia de empleos, los sectores comercial, de servicios y transporte serían los más afectados. “Vamos a ver capacidad instalada ociosa y despidos en esos sectores”, avizoró el especialista.
“Eso está confirmado porque afecta en un 50% a la tempranera (alrededor de 1 millón de hectáreas) pero ya me hablan de impactos en la siembra de octubre y podríamos ir a 5 millones de toneladas menos”, manifestó el economista y exministro de Hacienda.
Por su parte, Héctor Cristaldo, titular de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), reconoció que para el 2022 el panorama se presenta complicado por el déficit de lluvias.
Explicó que hasta noviembre los cultivos de soja venían bastante bien y en diciembre empezó la falta de precipitaciones, coincidente con el mes de mayor exigencia para las plantaciones, por lo que se reduce la expectativa de alcanzar nuevamente una producción de más de 10 millones de toneladas en la campaña 2021/22.
“El impacto negativo es preocupante, va a afectar la economía”, dijo el presidente de la UGP, al señalar que hay parcelas que reportan pérdidas entre 50 a 70% de los cultivos. Sostuvo además que hay zonas donde se registran lluvias entre 40 a 50 milímetros, pero no son suficientes.
Hace un par de semanas, José Cantero, titular del Banco Central del Paraguay (BCP), destacó que el PIB para el año entrante tendría un crecimiento del 3,7%, mientras el 2021 finalizaría en torno al 5%. UH