El fiscal Gedeón Escobar, de la Unidad Penal N° 2 de la ciudad de Emboscada, consiguió la condena de 20 años de prisión para un hombre de 43 años. El mismo fue sindicado como culpable de los hechos punibles de abuso sexual en niños, coacción sexual y violación en los que fueron víctimas sus dos hijas que tenían 11 y 14 años al momento de los ataques.
Los hechos de abuso por los que el hombre fue condenado ocurrieron en el año 2019, cuando los 4 hijos del hombre fueron a vivir con él, luego de separarse de su esposa.
Según datos de la causa, en una ocasión el hombre llevó a su hija de 14 años al río Manduvirá, donde la internó en una zona boscosa y abusó de ella, amenazándola con que, si no cumplía con lo que él le pedía, la golpearía y abandonaría en la calle. Desde ese momento los ataques continuaron de forma sistemática.
En la evaluación psicológica realizada por profesionales del Centro de Atención a Víctimas del Ministerio Público, la adolescente abusada explicó que su hermanita de 11 años de edad también había sido abusada sexualmente por su padre. La menor manifestó que el hombre abusaba de ellas con violencia, las maltrataba todos los días y además amenazaba constantemente con golpearlas si hablaban con alguien de lo sucedido.
Ante esta situación la pequeña de 11 años fue inspeccionada por el médico forense del Ministerio Público quien comprobó la existencia de varias lesiones que corroboran el relato de la víctima.
El Tribunal de Sentencia estuvo integrado por los jueces Alberto Peralta (presidente), Liliana Ruiz Díaz y Ángela Carolina Jara.
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