El Tribunal de Calificaciones de la Policía Nacional está a días de definir la situación general de agentes activos, para resolver ascensos, pases a retiro y bajas de personal que conforma la planilla del ente.
La adicción a las drogas que afecta a cuadros policiales es parte de los 1.255 expedientes abiertos a los agentes, por parte de la Dirección de Asuntos Internos.
En esa cifra global, los adictos pasaron a integrar el grupo numeroso de policías con esa afección, que cuenta con tratamiento especial, y que puede desembocar en bajas obligadas de la función policial.
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De acuerdo a datos proveídos en el ámbito en cuestión, el número de efectivos que padece de adicciones, está en incremento. Y el segmento de personal juvenil es el más impactado por este problema.
Los policías que fueron detectados con adicciones, son separados de las actividades y puestos a cargo de profesionales del hospital Rigoberto Caballero. Si el tratamiento de desintoxicación se concreta de manera efectiva, el paciente es reintegrado a los cuadros operativos. En caso contrario, son dados de baja.
Un policía activo, con arma, y con adicción a algún estupefaciente, representa un peligro para la sociedad, sostienen en la directiva policial. Hechos delincuenciales cometidos bajo efectos de drogas, por parte de agentes, se han sucedido a la largo de los últimos años.
Se considera, por otro lado, que irregularidades perpetradas por personal policial (coima, extorsión, gatillo fácil, robo, tráfico), están en concomitancia con la adicción a las drogas. Hoy