De abstenerse a rechazar a llamativas ausencias, formaron parte de lo que parece ser una estrategia casi perfecta para el blanqueamiento de la ejecución presupuestaria a pesar de las denuncias por graves irregularidades.
Solo 5 votos le fueron suficientes al intendente Carlos Benitez para tener aprobada su ejecución presupuestaria. ¿Qué pasó?, quienes dicen llamarse opositores se abstuvieron o simplemente no participaron de la sesión, lo que valió para que una minoría apruebe el balance prácticamente a ciegas.
El único voto por el rechazo fue el de Reinaldo Román Santa Cruz que si recibía el acompañamiento de los liberales se formaría una nueva mayoría opositora pero estos últimos prefirieron el blanqueamiento.
Según el documento: César Vigo, Alba Aquino y Roberto Britos se abstuvieron (blanquearon) en la votación mientras que Fanny Prieto y Eucebio Sotomayor llamativamente se aumentaron a quizás la sesión más importante del año, dejando vía libre a que con los cinco votos el balance quede aprobado.
Un plan fallido
Según trascendió, aparentemente había pleno acuerdo para que la aprobación del balance sea unánime (la motivación se desconoce), pero ante la postura firme de Román Santa Cruz (ANR), los “opositores” quedaron expuestos y no pudieron sumarse al plan debiendo abstenerse o simplemente ausentarse.