El ingeniero Pánfilo Benítez, asesor técnico de Itaipú Binacional, confirmó que el nuevo puente sobre el río Paraná tiene movimiento. “Pero es absolutamente normal para puentes atirantados”, sostuvo el especialista. Mencionó que llama la atención, pero “pronto será parte de nuestra cotidianeidad el movimiento que registra. Resalta que es “absolutamente seguro”.
El Puente de la Integración tiene un movimiento que es normal señala el Ing. Pánfilo Benítez, de Itaipú Binacional.
El Puente de la Integración tiene un movimiento que es normal, señala el Ing. Pánfilo Benítez, de Itaipú Binacional.
El ingeniero Pánfilo Benítez, asesor técnico de Itaipú Binacional, mencionó que “el movimiento que se registra en el puente que estamos terminando de construir sobre el río Paraná es absolutamente normal y no debe causar ningún temor”.
El Ing. Benítez, responsable de la construcción de los puentes sobre los ríos Paraná y Paraguay, en Carmelo Peralta, resaltó que “pronto va a formar parte de la cotidianeidad el movimiento del puente. Ahora llama la atención porque es una especie de novedad observar cómo se mueve”.
Entrando en detalles técnicos, explicó que “la construcción tiene 760 metros de largo. Es un puente atirantado con 470 metros de longitud libre. Es una obra muy importante. En ambas cabeceras tiene lastres de 10 mil toneladas cada una”.
Agregó que “los tirantes del puente cuelgan de dos torres: una de 180 metros de alto y la otra de 185 metros. Los atirantamientos van desde el centro hasta la caja de equilibrio. Cuando se unen ambas cabeceras del puente se liberan esas dos cajas de equilibrio de 10 mil toneladas que están apoyadas sobre neopreno. Esto es lo que se mueve”.
Un puente kyha
A modo de comparación, el Ing. Benítez dijo: “A partir de la terminación total del proyecto tendremos un puente que está en movimiento. Es un puente kyha. Tiene un movimiento que es normal”.
Recordó que “cuando estaba en proceso de construcción, en etapas anteriores, era normal moverlo 60 centímetros para arriba o para abajo porque se ponía un peso de más de 100 toneladas para mantener el punto de equilibrio”.
Resaltó que “el puente se mueve a lo largo de su eje, que es un movimiento habitual en un puente atirantado. Si fuera colgante, sería mucho mayor el vaivén”.
Dijo que “el puente casi no se mueve en forma lateral porque tiene topes de neopreno que se colocan para casos de terremotos u otras circunstancias extremas”.
Finalizó diciendo que “el movimiento que tiene el puente sobre el río Paraná es normal, está previsto en los cálculos estructurales y no debe generar ningún temor”. ABC