Tras la intervención del fiscal Edgar Benítez, de la médica forense Raquel Cáceres, y de una dotación policial, se confirmó que los cuerpos encontrados en el río Paraná, cerca del puerto de Mayor Otaño, corresponden al hombre y sus tres hijas menores, desaparecidos el domingo 3 de noviembre, de la colonia Ara Poty, de Los Cedrales.
Se trata de Rafael Ortiz (29) y sus hijas Fátima Mabel, Liz Araceli y Emma Sofía Ortiz Zorrilla, de 7, 5 y de 2 años, respectivamente. La madre Nancy Mabel Zorrilla Torres (23), es quien había denunciado la desaparición, tras recibir amenazas de su expareja de que si ella no volvía con él, se tiraría al río con sus hijas.
Los intervinientes informaron que los cuerpos ya tendrían cinco días de fallecidos, lo que indica que la misma noche del domingo o el lunes se habría dado ya el ahogamiento. El diagnóstico indica que la más pequeña de las niñas tiene un traumatismo de cráneo y según la médica forense, ya falleció por algún golpe antes de ser tirada al agua.
En el caso de las otras dos niñas y del hombre, el fallecimiento fue a causa de asfixia por sumersión o ahogamiento.
Los cuerpos de las niñas estaban entrelazadas entre sí con una piola y a la vez al padre de las mismas, quien se tiró al río junto con sus hijas.
Felipe Ortiz Colina (66), padre del fallecido, quien fue detenido ayer por sospecha de complicidad en la desaparición de su hijo con sus nietas, fue llevado hoy por los policías intervinientes hasta el lugar del hallazgo de los cuerpos, para el reconocimiento y el mismo confirmó que trataba de las citadas personas.
Es lo que indicó el oficial Cristian Pérez, de la División de Búsqueda y Localización de la Policía. “Trajimos al abuelo, en carácter de detenido, para que pueda reconocer a sus nietas y confirmó que se trata de ellos”, mencionó el oficial.
Los cuerpos fueron trasladados hasta una funeraria de Presidente Franco, para luego ser entregados a los familiares.
Antecedente del caso
La madre de las niñas, Nancy Mabel Zorrilla Torres, había denunciado al padre de sus hijas por prestación alimentaria y la separación se dio por hechos de violencia familiar. El fin de semana pasado se inició el régimen de relacionamiento con el padre, quien retiró a su hijas el viernes y las llevó a la casa de sus padres.
La mujer fue amenazada en forma inmediata de que debía volver con el padre de sus hijas porque si no hacía se iba a tirar al río con sus hijas. Esto fue explicado por el fiscal Edgar Benítez. LN