El presidente de Petróleos Paraguayos (Petropar), Denis Lichi, sigue sin renunciar al cargo y utilizando los recursos del Estado en su campaña electoral, atendiendo que el mismo es precandidato a la Gobernación de Cordillera por el movimiento oficialista Fuerza Republicana. El titular de la petrolera estatal había anunciado que presentaría su dimisión ya la semana pasada; sin embargo, una semana después sigue aferrándose al cargo.
Su renuncia no solamente se da en entorno a su precandidatura, sino ante las críticas y cuestionamientos hacia su gestión en la crisis desatada por el incremento de precio de combustible en el país y la presión de varios sectores, principalmente, como los gremios de camioneros que exigen la baja del carburante desde hace varios meses.
A finales de setiembre, Lichi anunció con bombos y platillos que renunciaría al cargo tras el escándalo de venta de combustible a precio preferencial a Bolivia y omitir la crisis generada en el país por el alto precio del mismo, esta situación dejó al presidente de Petropar como blanco de críticas desde varios sectores y principalmente de la ciudadanía.
“Estoy viendo, vamos a ver cuándo tomamos la decisión de abandonar la institución y dedicarnos a la campaña. Realmente a mí me gustaría ya trabajar en el departamento de Cordillera, visitar cada una de las compañías y los barrios”, mencionó Lichi en su momento.
Mientras tanto, desde el gremio de camioneros anunciaron en ese momento que aguardaban la renuncia del titular de la petrolera para seguir con la mesa de diálogo para negociar sobre la baja de precio del combustible. Esto, teniendo en cuenta que para esta quincena de octubre se prevé una reducción, sin mencionar de cuánto sería esta baja. LN