La bajante de los ríos Paraná y Paraguay provoca otros inconvenientes que van más allá de los problemas en la navegabilidad y el impacto en la calidad del agua, ya que también influye directamente en las hidroeléctricas Yacyretá, Itaipú y Acaray, que ya “redujeron bastante” la generación de energía a causa de la crisis hídrica.
El presidente de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), Félix Sosa, explicó que el combustible para la generación de energía eléctrica en Paraguay es el agua, considerando que las fuentes de generación de energía es 100% hidroeléctrica.
Entonces, la bajante de los ríos Paraná y Paraguay, más allá de los inconvenientes en la navegabilidad y el impacto que tiene en la calidad del agua potable, también tiene sus efectos en cuestiones energéticas.
“Cuando existe una cuestión de sequía o crisis hidrológica, siempre repercute directamente en la producción de energía eléctrica. Por tal motivo, en la central hidroeléctrica de Yacyretá, Acaray e Itaipú se está reduciendo bastante la generación de energía eléctrica con relación al año pasado”, enfatizó en contacto con radio Monumental 1080 AM.
Hasta la fecha, debido a la bajante del rio Paraná, las hidroeléctricas Yacyretá y Acaray ya redujeron alrededor del 30% su generación de energía e Itaipú un 20%.
ANDE aclara que “no existe” peligro
Igualmente, Sosa dijo que es importante resaltar que “se está manejando bastante bien el embalse de Itaipú”. Es decir, no está en una situación muy crítica y no existe posibilidad de peligro.
El embalse actualmente se encuentra en 218.35 metros sobre el nivel del mar. Mientras que en situaciones críticas se puede bajar, con una autorización, hasta 216 metros sobre el nivel del mar.
En agosto la bajante del río Paraguay registró un número histórico, alcanzando -0,71 metros, apenas 4 centímetros debajo del mínimo de -0,75 metros, el valor más bajo en 121 años.
Este martes alcanzó -1,30 en el Puerto de Asunción, 6 centímetros menos que el día anterior, según los últimos reportes y esto enciende las alarmas sobre una posible crisis de agua.
Mientras que el río Paraná, en Ciudad del Este, tiene un nivel de 9,40 metros, lejos de su pico histórico registrado el año pasado cuando alcanzó los 30,40 metros.
Precisó que “no existe ningún peligro en el abastecimiento de la necesidad del consumo en el territorio paraguayo”.
Operativo verano
Otro punto que Sosa abordó tiene que ver con el servicio que se brindará durante el verano, la temporada donde las temperaturas a nivel país sobrepasan los 40°C.
Mencionó que sí habrán cortes del servicio, pero todo esto va ir disminuyendo con los trabajos que vienen haciendo.
“Cuando termina un verano ya comienza el otro para nosotros. En la época de menor consumo es donde nosotros tenemos la posibilidad de trabajar bastante en obras y mantenimiento”, puntualizó.“Donde existe mayor demanda, siempre hay mayor inconveniente en época de verano”, prosiguió e indicó que en zonas como Asunción, área metropolitana y Bajo Chaco están el 60% de la demanda de energía eléctrica. UH