Gran cantidad de bebidas, como para surtir una bodega, fue hallada en el penal de Ciudad del Este, en el sector llamado el Rancho. Fueron llevadas por internos que pertenecen al PCC, según sospecha.
La corrupción penitenciaria sigue inundando de despropósitos y hasta de groseros episodios las cárceles del país, lo que agrava la ya dilatada crisis y evidencia el gobierno de grupos criminales, que gozan de obscenos privilegios en los centros penitenciarios.
Una muestra de ello es la cantidad de bebidas alcohólicas halladas en la cárcel de varones de Ciudad del Este, en la madrugada de ayer, durante un operativo realizado en celdas privadas del sector denominado el Rancho, las cantinas y el pabellón blanco A Baja, donde se encuentran detenidos miembros del grupo criminal brasileño Primer Comando Capital (PCC).
El hecho llamó la atención por la escandalosa cantidad de bebidas alcohólicas encontradas en uno de los sectores donde funciona una cantina bien surtida.
El Ministerio de Justicia informó que, además, se logró confiscar otros objetos ilícitos, como ser aparatos celulares, sustancias estupefacientes, aparentemente marihuana.
El procedimiento se realizó en el sector Rancho, cantinas y pabellón Blanco A Baja, donde están los soldados del Primer Comando Capital.
Las fotografías sobre el procedimiento realizado en forma exclusiva por agentes del Grupo de Requisa y Apoyo Penitenciario (GRAP), personal de la Unidad de Seguridad Información e Inteligencia Penitenciaria, apoyados por policías del Grupo Especial de Operaciones, revelan que hubo un masivo ingreso de bebidas en el penal.
Entre lo incautado se hallan botellas de whiskies de conocidas marcas, desde las económico a las más caras; varias decenas de cajas de vinos en cartón, otros paquetes de vinos en lata, así como packs de cervezas de diferentes marcas, cañas etiquetas negras y vodka, como para surtir una bodega, de acuerdo a los datos.
La mayor parte de esta camionada de bebidas estaba en el sector denominado el Rancho, donde están los reclusos que tienen permiso de desplazamiento en el sector, según agentes del GEO.
El Ministerio de Justicia informó que las autoridades continuarán investigando para determinar la procedencia de los objetos confiscados, así como las posibles responsabilidades de los reclusos involucrados, a través de un reporte de prensa.
En el texto señala que la cárcel de CDE “ha reforzado sus medidas de seguridad y mantendrá una vigilancia constante para prevenir la introducción de elementos ilícitos y mantener la integridad de sus instalaciones”.
Se maneja la información de que las cámaras de seguridad instaladas en el penal estaban apagadas cuando se realizó el ingreso de la camionada de bebidas.
Estos hechos se dan en una semana escandalosa para el Ministerio de Justicia por la liberación de un hombre que debía cumplir condena hasta el 2040 por violación, hecho que salió a la luz el pasado 29 de mayo.
Se trata del argentino Luis Héctor Morínigo Cantero, que ni bien salió del penal abandonó el país y luego volvieron a pedir su captura.
El ministro de Justicia, Daniel Benítez, habló de un “error bastante grave”. Indicó que ordenó una investigación interna. UH