Un bebé de tan solo un año y cinco meses de edad, oriundo de Capiatá, Departamento Central, fue sometido este martes a una intervención quirúrgica para la extracción de un parásito intestinal de 40 centímetros, informaron a través de NPY.
El pequeño fue trasladado hasta el centro asistencial por una complicación respiratoria y dolores en la zona abdominal, pero al ser sometido a algunos estudios se constató que padecía ascaris lumbricoides, más conocido como lombriz intestinal o sevo’i pytã (en guaraní), que estaba alojado en el intestino delgado.
De acuerdo con los registros médicos, el niño aparentemente ya contaba con antecedentes de expulsión de parásitos intestinales, cuyo problema no habría sido tratado como corresponde.
Tras el caso, el doctor Robert Núñez explicó a través de NPY que el caso es considerado grave, debido a que incluso puede causar una perforación en el intestino. No obstante, señaló que es algo casi común, ya que cerca del 50% de la población infantil sufre de esta dolencia.
«El tema de la parasitosis, según estudios que hechos en toda la región y específicamente en Paraguay, en escolares se ha visto una prevalencia de casi el 50%», indicó.
Además, recordó a los padres que es recomendable que los niños consuman los antiparasitarios desde los un año de edad, a fin de prevenir un cuadro de parasitosis.
«Tenemos que considerar que desde el momento que un niño o niña empieza a explorar, a jugar y gatear, ya está tocando el suelo, está tocando cosas que lleva a la boca. Ahí ocurre la ingestión de los quistes y huevos de los parásitos, y desde ahí empieza la colonización por el tuvo digestivo», manifestó el profesional. UH