El ministro de Justicia Ángel Barchini indicó que los trabajos finales en las tres penitenciarías construidas en Minga Guazú y Emboscada, estarán finiquitados en la brevedad posible y con la capacidad de ser utilizadas en un 100%. Estos nuevos centros penitenciarios apuntan a descomprimir las cárceles actuales y albergar en espacios exclusivos a reclusos de alto nivel de peligrosidad.
“Yo creo que así como están las cosas, en 70 u 80 días estaremos ya ocupando casi el 100% de los nuevos centros penitenciarios. Tenemos que hacer algunas pruebas con respecto al agua, electricidad, algunas modificaciones con respecto a la seguridad perimetral que nos está faltando”, adelantó el ministro.
Las obras están actualmente en una fase de culminación de detalles de modo a asegurar que la estructura no permita la fuga de los reclusos. Además, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) está realizando trabajos de asfaltados en el penal de Minga Guazú, Alto Paraná, al tiempo que se constata la conectividad de las cámaras que funcionarán en las tres penitenciarías.
“Algunos detalles no puedo revelar por seguridad pero hay un trabajo intenso, programado, y un cronograma que el presidente de la República exige que sea cada semana. El mandatario personalmente nos exige resultados a nosotros sus ministros, quienes tenemos que rendir examen cada semana”, detalló a la 1080 AM.
Por otro lado, recalcó que no existe posibilidad de que los miembros del Clan Rotela, quienes fueron trasladados del penal de Tacumbú, puedan volver a reagruparse, dado que no tienen ningún tipo de contacto entre sí, y están bajo el custodio de fuerzas policiales y militares. Al mismo tiempo, el contacto con el exterior es casi nulo pues se limitaron los regímenes de visitas para los mismos.
“No tienen la más mínima posibilidad de que puedan volver a juntarse, delinquir y arrodillar al Estado ante la mafia, los tenemos observados, controlados y separados en celdas. Están 22 horas al día encerrados, tienen permitido salir una hora en un espacio reducido controlados, vigilados y esposados, ellos no tienen la posibilidad ni de hablar entre ellos”, ratificó Barchini. LN