En Santa Rosa, Departamento de Misiones, en la finca de la familia Vega Alvarenga, en el emprendimiento familiar conocido como Filo Hortic, están realizando una investigación con el apoyo de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), para producir un rubro alternativo conocido como grosella o flor de Jamaica.
Consiguieron semilla de tres variedades traída de Cuba, lo plantaron en noviembre y lo están cosechando en este mes de mayo, siete meses después, indicando que la planta se adapta bien y no requiere mucho cuidado, pudiendo ser una opción alternativa de renta para el productor.
Oscar Vega Alvarenga, productor de Filo Hortic, explicó que plantaron en total 100 plantas. Dijo que mirando rápidamente, ven la diferencia en colores y tamaños y hay una variedad en el país que no está registrada, conocida como criolla.
Explicó que en esta parcela investigativa no le pusieron fertilizante, no le hicieron mucho tratamiento para ver su reacción.
“Es una planta muy noble. Se adapta perfectamente. Es rústica y a pesar de que es la primera vez que cultivamos las plantas, se desarrollan bien. Tuvo un proceso de siete meses para la cosecha”, expresó.
Vega Alvarenga, quien es egresado de la Facultad de Ciencias Agrarias en la carrera de ingeniería agronómica, mencionó que es fundamental en este tiempo combinar la academia con el trabajo para obtener ganancias en la producción, al tiempo de enumerar las bondades de la grosella.
Manifestó que este rubro tiene muchas propiedades medicinales para controlar la diabetes y el colesterol, además de ser antioxidante y una aliada para bajar de peso.
Asimismo, se usa en la culinaria para hacer mermelada con un sabor agridulce, licor, té, licuados, agua de Jamaica y arreglos florales.
Manifestó que tienen la idea de desarrollar y promocionar este producto en Paraguay.
Reveló que que no se cultiva a nivel comercial, sino solo en forma ornamental y medicinal en su jardín.
Venderán las mermeladas de 140 gramos a entre G. 5.000 a G. 6.000 para promocionar.
El productor destacó que es un rubro aún incipiente con poco mercado, buen precio y que el objetivo mayor es promocionar, dar a conocer y que los productores del país prueben producirlo.
Añadió que la semilla se puede usar tostado para hacer un polvo para usar como café o como harina, esto principalmente en México y en Cuba.
Mencionó que en Paraguay si buscan este producto 100 gramos de flor de jaimaca deshidratado, que concentra mejor las propiedades de la planta, se consigue entre G. 7.000 a G. 10.000.
“Este es un cultivo en desarrollo. Aún no hay mucho mercado. Existen variedades que tienen más tamaño, más semilla, más propiedades y es mayor su rendimiento. Pusimos 100 plantas para empezar. Así vamos a juntar semillas y el año que viene, publicar una investigación”, detalló Vega Alvarenga.
El emprendedor mencionó que la familia tiene su propia marca de mermeladas denominada “Abuela Lili”.
“Con nuestra marca vendemos mermelada de tomate y la idea es ir sumando más productos a nuestra marca, como por ejemplo, esta mermelada de grosella, mermelada de calabaza, entre otros”, UH