Un hombre, condenado por estafa, por fin responderá por los hechos después de estar prófugo de la Justicia por una década. Junto con una mujer, engañó a un ingeniero por USD 400.000. Su pareja delictiva sigue con paradero desconocido.
La Policía Nacional logró detener a un hombre condenado a dos años de prisión por estafa y que viene construyendo un perfil criminal, sumando antecedentes por hechos delictivos desde 1993.
Se trata de Carlos Alberto Benitez, de 57 años, quien lleva prófugo de la Justicia por 10 años.
Su detención se dio tras el montaje de un trabajo de inteligencia que consistió en un operativo de vigilancia en el barrio Puerto Pabla, según indicó el comisario César Diarte, jefe de Investigación de Asunción, a NPY.
El caso de estafa se registró en el 2014 y tuvo como víctima a un ingeniero que tenía la intención de vender un inmueble ubicado en la ciudad de Lambaré valuado en USD 400.000.
El ingeniero y los estafadores, que se hicieron pasar por una pareja, llegaron a un acuerdo y fueron hasta una escribanía para hacer la transacción y la entrega de un cheque de USD 200.000.
La víctima, al volver de los Estados Unidos, quiso efectivizar el cheque; sin embargo, se encontró con la sorpresa de que el documento contable fue denunciado como extraviado por los mismos emisores.
Desde entonces, intentó llegar a un acuerdo sin éxito hasta que la causa llegó hasta los estrados judiciales, donde Carlos Alberto Benítez y una mujer fueron declarados culpables y condenados a dos años de prisión.
La víctima no pudo recuperar el dinero ni su inmueble, que ya tiene otros dueños que sí pagaron por la totalidad del terreno.
La mujer aún se encuentra prófuga, pero desde la Policía Nacional manejan la información de que estaría por el país, de acuerdo con Diarte. HOY