Los casos de Covid-19 aumentaron un 6% la semana pasada en Asia-Pacífico (1,4 millones) y en América (1 millón de contagios), mientras que bajaron un 20% en Europa (1,1 millones) y un 23% en el sur de Asia (54.000).
En las estadísticas de decesos, hubo un incremento del 30% en las muertes semanales en Oriente Medio, aunque sus cifras absolutas son bajas (173 fallecidos).
En Europa las muertes semanales bajaron un 23% (3.500), mientras que los números se mantuvieron estables con respecto a la semana anterior en Asia Pacífico (1.200 decesos) y en América (3.600).
Los países que más casos confirmaron la semana pasada fueron EEUU (713.000, un ascenso del 18%), China (543.000 contagios, un 39% más) y Australia (360.000, una subida del 8%).
EEUU también fue el país con más fallecimientos registrados por Covid-19 del 16 al 22 de mayo (1.900), seguido de Italia (736), Brasil (713), Rusia (680) y España (564, más del doble que en la semana anterior).
Prácticamente todos los casos analizados en laboratorio en los últimos 30 días pertenecen a la variante ómicron, y dentro de ella un 94% son del sublinaje BA.2, con mayor transmisibilidad que BA.1, pero sin diferencias en cuanto a potencial de desarrollo de formas graves de Covid.
En el acumulado desde el inicio de la pandemia, se han registrado 524 millones de casos de coronavirus, aunque la OMS reconoce que la cifra real podría elevarse a «miles de millones».
Del mismo modo, el cálculo oficial habla de 6,2 millones de fallecidos reportados, si bien los estudios de exceso de mortalidad de la organización calculan hasta 15 millones de decesos relacionados directa o indirectamente con la pandemia.
Para combatir la pandemia se han administrado en el planeta hasta el momento 11.800 millones vacunas anti-Covid, con las que el 65% de la población global ha recibido al menos una dosis, aunque este porcentaje baja al 16% en las naciones de renta baja.