La autopsia confirmó que el cuerpo hallado en Artigas pertenece al cambista secuestrado Vicente Arsenio Centurión (54). El cadáver presentaba un tiro en la cabeza y estaba amordazado con un pedazo de tela , pero no se pudo determinar el tiempo de fallecimiento.
Pese a que el cuerpo sin vida de Vicente Arsenio Centurión ya estaba en un avanzado estado de descomposición, las placas dentarias presentadas por los familiares, posibilitaron la identificación, a más de una prótesis de platino en el brazo, producto de una fractura, según explicaron los investigadores.
La verificación efectuada por un equipo de forenses a cargo del fiscal Lorenzo Lezcano confirmó además que la víctima fue muerto de un balazo en la cabeza, el impacto fue en el costado derecho a unos centímetros por encima de la oreja, con orificio de salida en el lado izquierdo, lo que le habría causado una muerte instantánea.
Igualmente, se pudo comprobar que el cuerpo estaba amordazado con un pedazo de tela y que aparentemente estaba de rodillas cuando sufrió el balazo que acabó con su vida.
El cuerpo habría sido desenterrado
Los forenses también pudieron determinar que el cuerpo estaba impregnado de arena húmeda, lodo y piedritas, lo que hace sospechar a los agentes que el cuerpo ya estaba enterrado en otra parte y que recientemente fue desenterrado y envuelto en papel film, para finalmente ser abandonado a laa vera de un camino vecinal de localidad de Arequitá, a unos 40 kilómetros del casco urbano del distrito de General Artigas, en el departamento de Itapúa, donde fue encontrado en la mañana del lunes último.
El cambista fue secuestrado el 3 de agosto del año pasado en la ciudad de Villa Elisa, por presuntos miembros de una estructura criminal dedicada al tráfico de cocaína, debido a que el comerciante fue vinculado a un supuesto hecho de robo de 389 kilos de la droga que llegó al país el 15 de junio del 2022 a bordo de una avioneta que luego fue encontrada abandonada y sin la mercancía en medio de un cañaveral de Iturbe. El comisario Mariano Nilson Lambaré también sufrió amenazas por la pérdida de la carga valuada en US$ 800.000, informaron. Abc