Debido a la falta de recursos, el único Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Coronel Bogado, en el departamento de Itapúa, informó que cierran el cuartel “hasta nuevo aviso”, advirtiendo que “no se realizará ningún tipo de asistencia” a los habitantes del distrito ni alrededores.
La falta de recursos económicos impide que los voluntarios puedan prestar servicio, ya que los tres móviles que utilizan tienen desperfectos mecánicos. A esto se suma el ninguneo del que son víctimas por parte del municipio. La drástica decisión deja a los casi 12.000 bogadenses desprotegidos ante cualquier desastre natural, incendios, accidentes, emergencias de salud, y más.
Los voluntarios aclararon que no reciben ningún tipo de pago de la municipalidad local, y que venían realizando diversas actividades de colecta para sostener el cuartel; sin embargo, no alcanzaban para el mantenimiento del edificio y los equipos para la labor de los bomberos.
Informan que los voluntarios actualmente solo cumplen guardias para evitar robos en los cuarteles. Respecto a la responsabilidad penal y civil de eventualidades catastróficas que puedan ocurrir, dejan a cargo del intendente Héctor Céspedes y su administración.
La intendencia de Céspedes está en falta con el compromiso de la ordenanza municipal de Coronel Bogado, que establece el cobro de G. 1.500 por cada pago de impuestos de patente a rodados y registros de conducir, para pagar los servicios de los bomberos.
Esta ordenanza se estableció con base en la Ley Nº 3966, que establece la Ley Orgánica Municipal, que refiere en cuanto a las funciones municipales “la prevención y atención de situaciones de emergencia y desastres” en el capítulo III, artículo 12, sección 11, inciso b.
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