La situación económica de Paraguay se agravó en este 2022 a raíz de la fuerte sequía que afectó casi al 70% de la producción agrícola con una fuerte estimación de menores ingresos de divisas, con efecto en toda la cadena productiva. Sin embargo, la zafriña es como “una luz al final del túnel” por su buen rendimiento y ahora se suma un aumento en el precio internacional de la soja, que es positivo para el país, aunque no se podrá aprovechar del todo, según los expertos.
Ayer, el precio internacional de la soja en Chicago, EEUU, cotizaba en su mayor nivel en una década, en US$ 654 por tonelada, para cerrar la jornada en US$ 650 por tonelada, según los portales de cotización de commodities internacionales. Con este precio está a menos de un dólar del precio récord registrado el 4 de setiembre del 2012.
El economista, exmiembro del Directorio del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Carvallo Spalding, sostuvo a La Nación-Nación Media que esto es una buena noticia para el país, sin dudas, ya que los precios internacionales de productos que Paraguay exporta están en niveles altos, en términos de intercambio.
“Esto sin dudas favorecerá al ingreso de divisas por exportaciones, a pesar de que esto no va a impactar en términos de crecimiento económico para este año porque eso se mide en términos reales, sí mitiga un poco el shock climático agrícola que se registró y su efecto sobre otros sectores económicos”, aclaró.
Quitará presión cambiaria
Por otro lado, el economista agregó que otro aspecto positivo de esta noticia de permanencia en términos de intercambio favorable es que le quitará presión sobre el tipo de cambio. “Como todos sabemos, el dólar tiende a fortalecerse en el mundo por la continuidad de la política monetaria en Estados Unidos. Con esto se depreciará nuestra moneda”, dijo.
En ese sentido, explicó que el hecho de tener un intercambio alto tiene un efecto opuesto, ya que el precio alto de los commodities es igual a un menor precio hacia la depreciación. “Esto también va a ayudar a contrarrestar el efecto de mayor depreciación del tipo de cambio, sacándole presión. Con esto también sacaremos presión a la inflación por el lado de los bienes internacionales”, dijo.
Poco aprovechamiento
Por su parte, Sonia Tomassone, asesora de comercio exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), comentó a La Nación-Nación Media que esta situación de alza de precios de la soja ya será difícil de aprovechar este año, aunque algo se podrá sacar, ya que con una menor producción la exportación del grano está acabando.
“En unos dos meses estarían acabando los envíos, principalmente de aceites. Será difícil que Paraguay pueda aprovechar del todo esto, aunque todavía no hay perspectiva para la nueva zafra. Será muy difícil que estos precios altos se mantengan para la siguiente campaña, todo depende de la coyuntura internacional”, indicó. LN