Despiden con homenajes y profundo dolor al asesinado fiscal Marcelo Pecci

Con mucho dolor y clamor de justicia, cientos de allegados dieron ayer el último adiós al fiscal Marcelo Pecci, quien el pasado martes fue asesinado por sicarios en Cartagena, Colombia. Antes de que sus restos fueran inhumados en el cementerio de la Recoleta, pasaron por el club Guaraní y la parroquia San José, dos lugares cercanos a sus sentimientos, donde fue homenajeado.

En la mañana de ayer, el féretro que contenía los restos mortales del fiscal Marcelo Daniel Pecci Albertini llegó hasta el frente al club Guaraní, y permaneció brevemente. Alí varios seguidores lo saludaron con banderas del equipo aurinegro, del cual era ferviente hincha y ligado a la dirigencia. Estuvo presente el presidente con permiso Juan Alberto “Toti” Acosta, quien fue su amigo,

Al colegio San José

Posteriormente, fue llevado a la parroquia de San José de Asunción, el mismo lugar donde pasado el 30 de abril contrajo matrimonio con la periodista Claudia Aguilera. Allí se realizó un responso que fue presidido por los obispos Ignacio Gogorza Claudio Silvero, en presencia de familiares, amigos y otros allegados.

Representantes de diferentes grupos sociales donde Pecci se desenvolvía encontraron la forma de expresarle su homenaje al investigador, quien a sus 45 años de edad estaba en una etapa destacada de su carrera como delegado de la Unidad de Crimen Organizado del Ministerio Público e integrante del bloque antidrogas.

Bomberos voluntarios también expresaron su propio homenaje con el sonido de las sirenas.

Entre los presentes que asistieron al oficio se pudo observar a varios colegas de Pecci, entre ellos el presidente de los fiscales Augusto Salas y el padre del fallecido, Francisco Pecci Manzoni, quienes en primera fila sacaban fortalezas para consolar a la viuda, la periodista Claudia Aguilera.

También estuvieron sus compañeros de la promoción 1995 del colegio San José, con quienes a lo largo de su vida mantuvo contacto y amistad..

En la Recoleta

Finalmente, el féretro llegó hasta el cementerio de la Recoleta, donde a las 15:00 horas, fue depositado en el panteón familiar, ante el desconsuelo de sus allegados. Estuvieron presentes, entre otros, la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, y representante de la embajada de los Estados Unidos, entre otros. “Él no claudicó, cumplió con su deber. Él enfrentó el golpe porque en su vida él fue así. (…) El pueblo en general entiende que a él lo mataron desgraciademente porque molestaba por su honestidad a mucha gente”, lamentó Francisco Pecci Manzoni, padre del agente asesinado en Colombia el pasado martes

Abc
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