Los estadounidenses Victor Ambros y Gary Ruvkun ganaron este lunes el Nobel de Medicina por su descubrimiento del microARN, fragmentos diminutos de material genético que modifican cómo funcionan los genes a nivel celular y que podrían llevar a nuevos tratamientos contra el cáncer.
Sus hallazgos “están demostrando ser de importancia fundamental” en la comprensión del desarrollo y el funcionamiento de los organismos, explicó la Asamblea del Nobel del Instituto Karolinska en su anuncio oficial.
El microARN ha abierto nuevas estrategias para los científicos a la hora de tratar enfermedades como el cáncer al ayudar a regular cómo funcionan los genes a nivel celular, indicó la doctora Claire Fletcher, profesora de oncología molecular en el Imperial College London.