Un material de investigación hecho por el Canal Trece de Argentina muestra cómo se hace contrabando entre las ciudades de Puerto Iguazú y Presidente Franco, en el Alto Paraná. El tráfico de mercaderías arranca a la tarde y se extiende hasta la noche, sin control alguno. El comercio ilícito se hace en ambas vías con la complicidad de las fuerzas de seguridad y del poder político de ambas regiones, según testimonios de los lugareños.
El noticiero Telenoche, emitido por el Canal Trece de la Argentina, publicó un video en que se puede ver cómo operan las bandas que hacen contrabando entre Paraguay y Argentina a través del río Paraná. En este caso, la investigación se realizó entre Puerto Iguazú (Argentina) y Presidente Franco (Paraguay).
El contrabando, que se hace en lanchas, comienza alrededor de las 18:00 y avanza hasta horas de la madrugada. El equipo periodístico contabilizó más de 20 viajes de ida y vuelta de varias lanchas que cruzan el río. El control es absolutamente nulo.
Desde Paraguay se envía a la Argentina drogas, cubiertas, anteojos y camperas, dijo Norma Devechi, una periodista que trabaja en la zona, durante la entrevista. Del país vecino hacia Paraguay llegan aceite, harina, vino, pañales, pollo, combustible, bebidas alcohólicas y otros productos. Siempre se envía desde ambos lados lo que en el otro país está más barato de acuerdo al tipo de cambio.
La producción del canal logró registrar el modus operandi del contrabando: un camión llega a casas que están en Puerto Iguazú, a la vera del río, y allí las mercaderías se cargan en bolsas dentro de un depósito. Desde allí se transportan en lanchas cargadas a tope al otro lado de la orilla, donde “paseros” descargan los productos para que el recorrido se inicie de nuevo.
“Los pasos ilegales tienen dueños, son propiedades que tienen bajada al río. No están escrituradas porque son predios fiscales, pero lo maneja una asociación que integran argentinos y paraguayos”, dijo a Telenoche la periodista Norma Devechi, según se lee en el portal de Todo Noticias.
Ayer, desde la Unión Industrial Paraguaya exigieron la salida del comandante de la Armada, Carlos Velázquez -hermano del vicepresidente Hugo Velázquez-, y del ministro anticontrabando, Emilio Fúster, por haber reconocido que dejaron pasar un cargamento de contrabando en junio del año pasado.
Ese fue solo uno de los episodios de denuncia de “vista gorda” que hacen las autoridades para dejar pasar estas mercaderías presumiblemente a cambio de jugosas coimas.
Enrique Duarte, titular de la Unión Industrial Paraguaya, explicó ayer que los representantes de todos los gremios están reclamando debido al crecimiento del contrabando y los nulos resultados en la lucha contra este problema.
Agregó que van a retirarse de todas las mesas de debate que se han instalado para supuestamente luchar contra el contrabando “hasta que veamos una acción concreta y firme”. Aseguró que no quieren “tocar la honorabilidad de nadie”, sino “simplemente ver resultados”. Abc