El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, enfrenta llamados a prohibir las importaciones rusas de energía, pero hasta el momento no impuso sanciones energéticas al petróleo.
Según Bloomberg, el 66 % del petróleo ruso tiene dificultades para encontrar compradores y a corto plazo el impacto en la oferta es tan grande que los precios tendrían que alcanzar y mantenerse en 120 dólares el barril durante meses.
A medida que las sanciones se ampliaron y el cambio hacia la seguridad energética adquiere calidad urgente, es probable que haya ramificaciones para las ventas de petróleo ruso a Europa y EEUU, lo que afectaría 4,3 millones de barriles por día, según el análisis.
A nivel local, el sector privado prevé un nuevo incremento del precio del combustible este fin de semana. La diferencia estaría entre 500 a 700 guaraníes.