La condena de 30 años de encierro para el exagente policial Ramiro Rafael Rodas Benítez, tras demostrar ante un Tribunal de Sentencia su responsabilidad en el hecho punible de feminicidio y violencia familiar. La víctima fue su pareja Alicia Fernández Alviso.
El hecho ocurrió en octubre del 2020 en la localidad de San Juan del Paraná. En la oportunidad, la fiscal que intervino fue Liliana Galeano. El informe dio por resultado que el deceso de la mujer se produjo a causa de una asfixia mecánica por estrangulamiento, pero tenía otras lesiones graves en diferentes partes del cuerpo.
El hoy condenado se encontraba separado sentimentalmente de la víctima pero se habían reunido para hablar y compartir bebidas alcohólicas. Ambos se encontraban dentro de un automóvil, momento que efectivos policiales habrían visto al hombre agrediendo a su acompañante y supuestamente habría dicho que la estaba «corrigiendo». Lo gravísimo del hecho es que los uniformados de la zona habrían incurrido en omisión de auxilio y dejado que la situación sucediera.
Posteriormente, en una vivienda ubicada en la misma localidad, la víctima fue estrangulada. Al amanecer su hijo de 6 años encontró el cuerpo, por ello pidió socorro a un vecino y a su profesora mediante un audio de WhatsApp.
El entonces suboficial Rodas se entregó posteriormente en una Comisaria de Neembucú y quedó a disposición del Ministerio Público. Al momento de su entrega Rodas negó haber matado a su expareja.
El fiscal Albertini, quien representó al Ministerio Público en el juicio, logró demostrar con pruebas fehacientes, imágenes, testigos, informes periciales, que cada uno de los actos del asesino quien fue condenado a 30 años de cárcel.