Unas 50 familias afectadas por la crecida del río Tebicuary en el distrito de General Artigas fueron asistidas ayer tarde por la Gobernación de Itapúa y la Municipalidad con Kits de víveres y asistencia médica. El intendente Luis Arriola, afirmó que la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) le negó la asistencia a los artiguenses por una supuesta falta de recursos.
La crecida del río Tebicuary en la frontera entre los departamentos de Itapúa y Caazapá, afectó a cincuenta familias de la comunidad de Arekita, en el distrito de General Artigas. Las familias itapuenses claman por asistencia desde hace una semana, pues el avance de las aguas fue afectando a gran parte del centro de la comunidad.
Los pobladores locales recibieron la asistencia de la Gobernación de Itapúa y de la municipalidad de General Artigas, que entregaron dos lotes de 50 kits de víveres a pobladores que conviven con las aguas que llegan hasta sus residencias.
El intendente municipal, Luis Arriola, sostuvo que ante el pedido de asistencia a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), no tuvieron una respuesta positiva. “La Secretaría de Emergencia está en Emergencia, porque me dijeron que no tienen recursos”, afirmó el jefe comunal.
Arriola refirió que destinó recursos municipales para llevar asistencia médica a los lugareños, que exigen respuestas, ante la posibilidad de que la situación empeore, si continúan las intensas lluvias en la región.
Crisis sin respuesta
El titular del ejecutivo municipal sostuvo que la crisis todavía no es crítica en la zona, pero relató que la comunidad quedó totalmente aislada, porque los dos únicos accesos quedaron inundados.
En referencia a eso, sostuvo que existe un gran peligro para los pobladores, de mantenerse en constante crecida el nivel del río.
Para llegar al sitio, sólo se puede acceder con canoas, refirió, por lo que los residentes no pueden ir hasta los centros de salud o salir de la comunidad. Algunas de las viviendas ya empiezan a inundarse, relató Arriola.
Hace una semana que el intendente asistió a los pescadores y pequeños ganaderos de la zona con víveres, pero la situación se fue agravando con los constantes temporales y la crecida del río Tebicuary. abc