En la mañana de este lunes se realizó la apertura de LXII Reunión ordinaria del Consejo del Mercado Común de los Estados parte del Mercosur y Bolivia, con participación del canciller nacional Julio César Arriola y el designado próximo ministro de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez Lezcano.
El canciller argentino Santiago Cafiero encabezó la reunión con la presencia de los cancilleres de los cuatro Estados Parte y Bolivia, como antesala a la LXII Reunión del Consejo del Mercado Común y Cumbre de Jefes y Jefas de Estado del Mercosur y Estados Asociados que se desarrollará este martes 4 de julio.
El encuentro se desarrolla en la ciudad de Puerto Iguazú, provincia argentina de Misiones, y será la última en la que participará el presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, que dejará el Poder Ejecutivo el 15 de agosto próximo.
De acuerdo al cronograma de actividades, en la tarde de este lunes se realizará la Reunión Ordinaria del Consejo Mercado Común (CMC) del Mercosur en la que se suman los Estados Asociados e invitados especiales.
En paralelo tendrá lugar también la Reunión de Ministros de Economía y Presidentes de Bancos Centrales del Mercosur, Bolivia y Estados Asociados.
Para mañana martes, desde las 10:30 (horario argentino), tendrá lugar el inicio de la Sesión Plenaria de Jefas y Jefes de Estado del Mercosur, Bolivia, Estados Asociados e invitados especiales, que será encabezada por el Presidente Alberto Fernández junto a sus pares, siendo la primera vez que los mandatarios de los países del Mercosur estarán presentes en una Cumbre desde el 2019.
En el caso del Paraguay, la delegación estará integrada tanto por el Presidente en funciones, Mario Abdo Benítez, como por el mandatario electo, Santiago Peña.
Durante ambas jornadas se presentará el trabajo realizado por la Presidencia Pro Tempore Argentina, en los primeros seis meses del año.
En la apertura de la reunión de cancilleres, el representante argentino señaló que «en este tiempo de incertidumbre, tenemos que fortalecernos como bloque y achicar las brechas de desarrollo, porque en el mundo actual tenemos ese desafío como región y eso se logra a través de más integración y no de menos. No vamos a conseguir nada si nos desintegramos”, aseveró Cafiero.
Respecto del Acuerdo Mercosur – Unión Europea, Cafiero consideró que “la profundización del vínculo entre el Mercosur y la UE es una señal política necesaria, en un contexto internacional de conflicto e incertidumbre crecientes».
«El acuerdo puede ser, en nuestra opinión, un vehículo eficaz para que nuestro bloque pueda potenciar su participación en el reacomodamiento del mapa global de la producción y el trabajo. Es una discusión de autonomía geopolítica”, sentenció.