Con un gol en cada tiempo, Olimpia logró un triunfo estratégico para colocarse firmemente en la segunda posición y encaminar así su clasificación a la siguiente fase de la Copa Libertadores. El triunfo ante Patronato prácticamente lo pone al Franjeado en inmejorable situación para lograr su pase a la siguiente ronda, gracias a los goles de Iván Torres y de Diego Torres.

El entrenador Diego Aguirre sorprendió en la previa al apostar con una delantera sin referente, ya que últimamente lo venía haciendo con Guillermo Paiva o Facundo Bruera como «9». Pero esta vez, se jugó por Fernando Cardozo y Hugo Fernández, dupla que le resultó en algunos pasajes porque apostaba mucho al contragolpe.

El conjunto argentino manejaba la pelota, pero no tenía la creatividad necesaria para dañar al Franjeado, salvó los primeros minutos. El equipo de Aguirre estuvo muy flojo entre el medio y en defensa en la primera parte, lo que le costó algunos desbordes.

El Decano apostaba al contragolpe y encontró así la fórmula para golpear primero. Luego de un gran centro atrás de Víctor Salazar, el cuestionado Iván Torres apareció como un delantero para definir de zurda con un remate potente.

Desde ese momento Olimpia se acomodó mejor y en la primera mitad ya pudo liquidar la cuestión, pero no estaban finos sus ofensivos. Especialmente Cardozo, quien se perdió varias oportunidades para anotar y tranquilizar más el partido.

En la segunda mitad, Olimpia tenía más espacios para aprovechar el contragolpe, que fue a lo que jugó Olimpia en Santa Fe. Nuevamente el equipo de Aguirre tuvo chances para aumentar la ventaja pero no lo aprovechaba, lo que obviamente generaba cierta incertidumbre en el trámite. VS