A casi un año de haber prometido mayor transparencia y control de las gestiones de la cadena de importación y comercialización de combustibles derivados del petróleo, se observa que el Gobierno poco y nada avanzó en esa materia. Al menos así se puede concluir tras una reciente denuncia ciudadana que desveló la descarga presuntamente ilegal de producto al tanque de una gasolinera.
Playeros fueron fotografiados cuando descargaban combustible que estaban en bidones de plástico al tanque de la gasolinera, violando el protocolo estipulado para este procedimiento. Pese a la contudencia de la imagen, el local sigue funcionando con normalidad.
En julio de 2022, la ciudadanía se había volcado a las redes sociales para denunciar una serie de irregularidades en la comercialización de combustibles. En ese entonces, miembros del Gabinete del presidente Mario Abdo Benítez se unieron y anunciaron una serie de medidas para transparentar las gestiones en el rubro. Hoy, tras casi un año, se observa práctivamente nulo avance en el control a este sector.
Al menos esa es la conclusión a la que se puede llegar tras darse a conocer la semana última una nueva denuncia ciudadana en redes sociales, con fotografías respaldatorias, sobre la descarga irregular de combustible de origen desconocido. Se captó el momento en el que el producto se estaba descargando desde un cambión sin logo, de bidones de plástico al tanque del subsuelo de una céntrica gasolinera, utilizando conos de tráfico como embudo. La normativa estipula protocolos para el transporte del producto con condiciones específicas de que sea en camiones cisternas identificados con logo del emblema de la estación.
Al respecto, el Ministerio de Industria y Comercio (MIC), cuyo ministro es Luis Alberto Castiglioni, reportó a ABC que intervino el local y anunció sumario. De hecho, Juan Paredes, de la Dirección de Combustibles del MIC, respondió a una denuncia formal hecha desde la web de dicha cartera sobre el mismo caso. El funcionario afirmó que “sin duda alguna, las fotografías demuestran claramente que la mencionada estación está recibiendo combustible de alguna fuente no autorizada”.
Aún así, la gasolinera sigue funcionando con normalidad según constató nuestro diario.
Los organismos involucrados en el control y sanción tras una verificación como ésta son el MIC, el Instituto de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN), cuyo titular es Omar Pico, y la Secretaría de Defensa al Consumidor (Sedeco), Marcelo Estigarribia. Sedeco es la única entre entos entes que reporta en su portal las sanciones a gasolineras que incumplen con la normativa relacionada a la señalética, pues además de informar el nombre comercial y precio de cada producto, la estación debe indicar el octanaje del mismo.
Es decir, así como Sedeco sanciona y lo informa a la ciudadanía, el INTN y el MIC, principales organismos responsables de aplicar las normativas sobre el combustible (conforme al Decreto N° 10911/2000) deberían hacerlo. Es decir, sólo es cuestión de voluntad, sobre todo considerando que el Gobierno prometió transparencia hace ya casi un año.
Pero el MIC y el INTN no brindan datos útiles de cómo los clientes pueden controlar la calidad y cantidad del combustible que adquieren ni las reglas que deben aplicarse para el transporte de los productos. En sus sitios webs solo se aprecian los canales para las denuncias, que hace un año no existían como una app lanzada a mediados de 2022, pero no reportan el historial de las investigaciones ni sanciones aplicadas luego de las quejas ciudadanas. ABC