La peor derrota de Efraín pese a la Concertación

Con una tendencia de apenas 27 % frente al 43 % de Santiago Peña, las elecciones generales de este domingo marcaron la peor derrota de Efraín Alegre en su tercer intento de convertirse en presidente de la República, pese a contar con una plataforma de Concertación con una veintena de partidos políticos de la oposición.

En su primer intento, en el año 2013, Alegre alcanzó el 37.11% por 890.451 votos, mientras que en el año 2018 subió a 43.04% por 1.115.464 votos. En este nuevo fracaso, el dirigente liberal consiguió 798.239 votos (con el 96% de los votos escrutados en el conteo rápido), acompañado en la chapa por la onegeísta Soledad Núñez, aunque muy debajo de los 1.242.721 votos del candidato presidencial del Partido Colorado, en una diferencia de más de 440.000 votos.

La ambición presidencial de Efraín Alegre comenzó a perfilarse cuando se desempeñaba como ministro de Obras Públicas (MOPC) durante el gobierno de Fernando Lugo, desde 2008, por lo cual pidió permiso para su banca en el Senado. Sin embargo, por denuncias de malos manejos, Lugo echó a Alegre, así como a Rafael Filizzola que ocupaba el cargo de ministro del Interior, en junio de 2011. Filizzola, fundador del Partido Democrático Progresista (PDP), fue candidato a vicepresidente de Efraín.

Luego de apoyar la destitución de Lugo desde el Senado (”por la condena”) en el juicio político del 22 de junio de 2012, Efraín Alegre se centró en su carrera presidencial y que conoció la primera derrota el domingo 21 de abril de 2013 ante Horacio Cartes. El actual presidente de la Junta de Gobierno de la Asociación Nacional Republicana (ANR) había logrado 1.104.976 votos (45.68%) en aquella elección, pese a que Alegre tenía como una plataforma una coalición integrada por el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), Partido Democrático Progresista (PDP), Partido Encuentro Nacional (PEN) y Partido Social Demócrata.

En su siguiente intento, Alegre escogió al comunicador Leo Rubin como candidato a vicepresidente y se lanzó con otra plataforma concertada denominada Gran Alianza Nacional Renovada, que aglutinó a siete nucleaciones políticas de la oposición: PLRA, PDP, PEN, Partido Revolucionario Febrerista (PRF), Frente Guasu, Avancemos País (AP) y Partido del Movimiento al Socialismo (P-MAS).

El domingo 22 de abril de 2018, Mario Abdo Benítez fue electo como presidente de la República con 1.206.067 votos (46.42%), truncando nuevamente la obsesión de Alegre por gobernar el Paraguay. Convertido en titular del PLRA desde junio de 2016, Efraín eligió como dupla a vicepresidente a Soledad Núñez para las elecciones generales de 2023, pese a que se trató de una exministra del gobierno de Horacio Cartes, quien contribuyó a posicionarla en el ámbito político. LN

 

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