Cinco tripulantes de una avioneta robada murieron hoy de madrugada cuando la nave sustraída de un aeroclub, en el Chaco argentino, cayó a tierra en el momento en que se habría activado un sistema antirrobo.
Poco antes de las 02:00 de hoy la gavilla de maleantes paraguayos que aparentemente operaba para una estructura criminal dedicada al tráfico de cocaína irrumpió en el predio del aeroclub de Villa Ángela, localidad que esta ubicada en el sudoeste de la provincia del Chaco argentino. Inmediatamente, tomaron el lugar, mientras algunos de los intrusos custodiaban el sitio armado con una pistola calibre 9 mm, los demás alistaron una avioneta del tipo Cessna 206, cuyo valor sería de US$ 1.500.000 y pertenece al empresario agroganadero Roger Martin, según confirmaron medios de prensa local.
Inmediatamente, los intrusos abordaron la nave que estaba en uno de los hangares del lugar y sin más trámites levantaron vuelo con dirección al norte, hacia la frontera con Bolivia. Sin embargo, unos cinco minutos después de levantar vuelo aparentemente un sistema antirrobo que corta el paso del combustible comenzó a activarse y la nave rápidamente perdió potencia y se vino abajo.
La costosa nave impactó en las afueras de la ciudad y estalló en llamas, de los cinco ocupantes, uno salió despedido y su cuerpo fue a parar a unos cinco metros del lugar del impacto, los otros cuatro quedaron carbonizados en el interior de la máquina. Efectivos de la Policía local encontraron entre los restos, billetes de guaraníes, una gorra con la insignia del club Cerro Porteño y un teléfono satelital y la pistola calibre 9 mm, lo que hace suponer que los ladrones eran paraguayos.
La semana pasada, delincuentes también robaron una nave de un aeroclub en Caaguazú, que luego fue recuperada en Bolivia.
Según los agentes, actualmente hay una sobreproducción de cocaína en Bolivia y necesitan avionetas para transportar la droga, por lo que comenzaron a robar estas naves en el Brasil, Paraguay y el noreste argentino. ABC