Consiste en la apertura de un espacio de desarrollo infantil en el barrio San Isidro de Encarnación y la implementación de estrategias de atención integral para adolescentes en las Colonias Unidas.
Se trata de nuevas acciones de prevención en barrios vulnerables que buscan evitar que los niños y adolescentes caigan en adicciones y otros problemas sociales que son muy frecuentes en las ciudades.
Este tipo de programas buscan desarrollar habilidades, talentos y ofrecer oportunidades a todos los niños y adolescentes del país. De acuerdo a la experiencia obtenida, los resultados son bastante auspiciosos en los principales vecindarios del país.